Cuando empezó el 2018 no me imaginaba ni por asomo que iba a ser un año tan bueno. Es cierto que, por lo general, prefiero los años pares a los impares, pero tampoco es un hecho del todo fiable (aunque, sí). Este año 2018 se han juntado dos cualidades para la buena suerte: por una parte, que sea año par y por otra que termine en 8. Sin buscar una explicación lógica y racional, me voy a quedar con la creencia que ha sido la magia de los números la que han conseguido que este año que dejamos atrás haya sido tan bueno.
Tarraco fue la primera urbe romana fuera de la península Itálica en el siglo III a.C y fue la capital de la provincia Hispania Cierior Tarraconensis. Como en todas las metrópolis romanas, Tarraco también contaba con un lugar donde hacer "espectáculos" más o menos violentos, más o menos divertidos, para tener a la gente ocupada y contenta. Estos actos se celebraban en el Anfiteatro. Un anfiteatro que casi dos mil años después se muestra frente al mar para contarnos como fue aquella época.
La capital de la Costa Daurada, Tarragona, es la ciudad que nació de aquella Tarraco romana y los vestigios que perduraron de la civilización que habitó durante siglos estas tierras catalanas, son hoy en día Patrimonio de la Humanidad por la Unesco: se trata del Conjunto arqueológico de Tarraco.
La capital de la Costa Daurada, Tarragona, es la ciudad que nació de aquella Tarraco romana y los vestigios que perduraron de la civilización que habitó durante siglos estas tierras catalanas, son hoy en día Patrimonio de la Humanidad por la Unesco: se trata del Conjunto arqueológico de Tarraco.